lunes, septiembre 15, 2008

EL BÚHO 6
Madrid 28 de Febrero 2004

Querida Justine

Volví a Madrid. Pasé muchas horas estudiando en casa para los exámenes. Cuando más me cundía era por la noche. Dormía las tardes, cuando regresaba de las clases, hasta el oscurecer. Mi madre siempre me tenia preparada la cena. Como con hambre, yo que era tiquis- miquis ahora me gustan las morcillas de arroz del pueblo de mi padre, o el hígado a la plancha. El otro día al ir al mercado por las morcillas y el hígado vi que tenían sangre, compré un kilo que mi madre preparo encebollados, me gustan especialmente cuando todavía están crudos por dentro, son tiernos y sabrosos. Mi madre dice que este tipo de alimento hace sangre, y que me podré fuerte y dejare de tener anemia.

He tenido resultados muy buenos en los exámenes, especialmente el de anatomía que me parece cada vez más fascinante. Decidimos celebrarlo tomando unas copas. A la vuelta cogí el búho. El conductor era el mismo de otras veces, cuando subí me dio un vuelco al corazón y me quedé sin aliento pero, el no preció reconocerme, ni siquiera contesto a mi saludo, estaba mirando fijamente un perro muerto que había en la acera, seguramente alguien lo había atropellado. Aunque yo tenia bastante frío él parecía que tenia mucho calor su cara estaba congestionada y su labios brillantes. Aunque me gusto que se turbara por la muerte del perro, me dolió que me ignorara de esa forma. Me senté atrás y toda la alegría de la tarde desapareció. Supongo que no tengo ninguna razón para pensar que yo significo algo para él, pero me siento triste.

Creo que me estoy enamorando. Con sólo oír el motor del autobús siento un desmayo y un escalofrío por todo el cuerpo. Pese al frío duermo con la ventana abierta para poder escucharlo en el silencio de la noche. Imagino que me esta gritando ¡Ven! ¡Ven!

Debo concentrarme en el próximo cuatrimestre, si sigo sacando las mismas notas seguro que me dan la beca. Eso me estimula.

XXXOOO


Imagen tomada de DeviantART

1 comentario:

S. M. L. dijo...

sigo leyendo
presiento que viene algo intenso