viernes, marzo 27, 2009




LA ARAÑA

Y
LA MARIQUITA



La araña afanosa tejía su mallaa donde esperaba atrapar, moscardones y abejorros. La mariquita volaba de flor en flor, de hoja en hoja, disfrutando de la abundancia de la primavera. La araña la llamó por que estaba aburrida para reírse de ella, de su insignificancia. La mariquita pasó de largo como si no la oyera y siguió su camino. La araña ofendida redobló sus esfuerzos con la tela, y enseguida vio los resultados; varios ejemplares cayeron en sus redes y los envolvió en capullos decorando así su casa. Se reía diciendo: Mira, mira cuantos tengo. Pero para entonces la mariquita ya estaba lejos de protagonista en otro cuento.

Imagen: O. Redon

5 comentarios:

ybris dijo...

Menos mal que no hizo caso la mariquita.
Ciertos destinos son mejores que adornar las mallas de las arañas.
Así podremos encontrar a nuevos protagonistas de otros cuentos.

Besos.

Esther Hhhh dijo...

Muy lista la mariquita.. ¿sabes, querida Fortu? Una vez tuve un sueño muy curioso, en un mundo de mariquitas... Jejeje..

Besitos

PD:Este finde cumplo la faena encomendada, por fin, apuff....

Anónimo dijo...

qué es una mariquita? una chinita?
D.

Fortunata dijo...

En España se las conoce por Mariquitas pero tambien se las llama popularmente, chinitas, catarinas, sarantontones, o vaquitas de San Antonio o de San Antón.
Son pequeñas con dos alas duras de color rojo, con puntos negros.

Anónimo dijo...

Pobre arañita, está más apegada a su tela de araña que los moscardones que cayeron en ella. Lo peor es que es ese apego lo que la ciega; nunca podrá envidiar la libertad de los que pasaron volando sobre ella.