viernes, diciembre 10, 2010

LA SERENA 1

La habitación en la que se alojaba estaba llena de color, rojos, azules, amarillos, lo muebles de madera nueva todavía
olían a barniz. y aunque la habitación deba a una calle céntrica, el bullicio ya se había apagado. Encendió su book net y se conecto a la red, esta vez tenia wifi en la habitación. El hombre que la recibió en el residencial era muy amable, y no carecía de cierto atractivo, ella se sentía tan cómoda que se comporto con naturalidad. a él también se veia cómodo hasta que apareció su señora, entonces sin dejar de ser amable mantuvo una mayor rigidez. Pidió permiso para prepararse una once mientras hablaban. Por un momento se sintió como en casa.
Había pasado el día tragando tierra, le habían aconsejado viajar de día para ver el paisaje, pero los cambios substanciales de vegetación se sucedían lentamente, la presencia de la cordillera era una columna vertebral y a lo largo de ella se fueron dejando campos jugosos de viñas y frutales para ser ocupados por bosques de eucaliptos, playas desiertas de azul intenso en la que rompían olas dejando formas caprichosas de espuma blanca. después la tierra se hizo cada vez mas árida, en ella solo crecían cactus de dedos largos y pequeños arbustos, el color de la tierra cambiaba del dorado al parduzco casi negro. durante todo el trayecto vio pocas poblaciones que fueran algo mas de un reducido grupo de cabañas. Por fin llegó pensaba pasar un par de días antes de continuar ruta. Parecía que había cosas lindas para ver. La gente la había hablado y de forma muy amable.
Quería escribir, terminar una historia que había empezado un par de días antes, sin embargo le pesaban los ojos, y no acertaba a saber como continuar, y no era cuestión de forzar los acontecimientos. Las historias tienen vida propia, a veces solo asoman la cabeza y esconden todo el cuerpo como si tuvieran miedo de desnudarse así de pronto ante los ojos de una desconocida. Sólo cabía esperar y volver sobre ella hasta que quisiera salir completamente a la luz.
Si, estaba cansada. ¿qué sentido tenia seguir luchando? mejor rendirse a las suaves caricias de Morfeo.
Buenas Noches !Hasta mañana!

2 comentarios:

Anita Dinamita dijo...

Aquí se condensa toda la historia, y me parece una frase increíble "Las historias tienen vida propia, a veces solo asoman la cabeza y esconden todo el cuerpo como si tuvieran miedo de desnudarse así de pronto ante los ojos de una desconocida"
Descansa Fortunata y hasta mañana...

Anónimo dijo...

Hasta mañana
Y disfruta la Costanera, el barrio inglés de Coquimbo, la Cruz del Milenio, el club de jazz en la plaza de armas de La Serena, las Iglesias... las decenas de iglesias, las casas históricas, enfin...
Un abrazo
D.